miércoles, 15 de abril de 2020

LOS PIONEROS DE LA EDUCACIÓN ADVENTISTA EN EL PERÚ


LA HISTORIA DE LA EDUCACIÓN ADVENTISTA EN EL PERÚ
Y SU FILOSOFÍA



¿CUÁNDO Y POR QUÉ LLEGARON LOS ADVENTISTAS AL PERÚ?


Los cristianos adventistas llegaron al Perú con el propósito de presentar el Plan de Redención, un proyecto elaborado por el Creador y gobernante del universo. Redención es sinónimo de educación integral, el Redentor desea salvarlos de la vida de pecado, y educarlos para que sean futuros ciudadanos de su reino eterno, esta es la razón porque llegaron al Perú. Los principios y la filosofía de la educación cristiana, están registrada en las Sagradas Escrituras, denominada la Biblia. Esta tarea educativa fue encargado a sus discípulos con estas palabras: “Toda la autoridad me ha sido dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id a todas las naciones, haced discípulos… yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.” (Mat. 28:18-20) Todos los alumnos, o discípulos de este siglo tenemos que apoyar este plan de redención.

Todos los seres humanos tenemos necesidades físicas, mentales y espirituales que satisfacerlas como seres físico-mental-espirituales. Nuestras necesidades físicas son: la alimentación, vestido, la salud física. Las necesidades intelectuales son: la adquisición de conocimientos y de habilidades, o adquisición de capacidades profesionales, o de un oficio. Las necesidades espirituales como: el amor, fe, la salvación, valores morales. Satisfaciendo estas necesidades tendremos una salud integral: salud física, mental y espiritual; en otras palabras, tendremos una educación integral cristiana.

El concepto de la educación cristiana es amplia y completa.  La educadora Elena de White da el concepto siguiente: “Es desarrollo armonioso de las facultades físicas, mentales y espirituales. Prepara al estudiante para el gozo de servir en este mundo, y para un gozo superior proporcionado por un servicio más amplio en el mundo venidero.” (La Educación, 13)

 El Señor Jesucristo, Maestro por excelencia, tiene un Plan de educación o, redención para la humanidad, él desea salvar de la ignorancia, de la práctica del pecado o del mal y de sus consecuencias. El objetivo de est proyecto educativo es educar para que sean ciudadanos de su reino eterno.

Todos los discípulos del Maestro de Galilea de este siglo, tenemos esa misma filosofía de educación integral en nuestra mente, por esta razón cooperamos al Maestro de los maestros, porque creemos que la educación cristiana es la solución a los problemas que tenemos en nuestro planeta.


La tarea educativa se inicia en los hogares, continua esta tarea en las iglesias, y en las instituciones educativas, sean de nivel primaria, secundaria y superior. Los agentes de la educación son los padres, maestros y la sociedad. La primera maestra en la escuela del hogar es la madre y le sigue el padre.

¿Cuándo llegan los cristianos adventistas al Perú?

El día 26 de junio de 1898, Foreign Mission Board de la Asociación General de la Iglesia Adventista aprobó el proyecto misionero para Perú, Bolivia y Ecuador, este proyecto sería ejecutado mediante la Misión Chilena. Plan financiado por los hermanos de Alemania y la Misión Chilena, el aporte inicial sumaba a 150 dólares.  (Información recabada de la revista, Review and Herald. 06 diciembre 1898)

En el mes de agosto de1898 partieron del Puerto de Valparaíso Chile dos grupos de misioneros laicos con dirección al país del Perú, uno de los grupos de misioneros laicos llegó a Mollendo, este grupo conformado por José Osorio y su hermano Liborio con sus familias. De Mollendo se dirigieron a la ciudad de Arequipa; su ocupación para sostenerse económicamente era el comercio ambulatorio. En una ocasión cuando estaban distribuyendo folletos de contacto misionero, fueron rodeados por una multitud de personas con la intención de agredirlos físicamente, la policía evitó tal hecho, encerrando en la comisaría, luego fueron deportados a su país.

El segundo grupo de misioneros laicos se dirigieron a Callao, este grupo estaba integrado por: José Luis Escobar y esposa, Víctor Thomann, los hermanos Luis y Víctor Osorio, era el mes de junio de 1898. Este grupo se estableció en la ciudad de Lima, trabajaron con mucha cautela para que no sean deportados como el grupo que llegó a Arequipa, trabajaban en diversos oficios para autosostenerse. En el mes de junio de 1899 se informa que se habían bautizado tres personas en Lima, bautismo realizado por el hermano José Luis Escobar, así consta en el informe hecho por el Pr. G. H. Baber. (Review and Herald. 06 junio 1899)

En 1900, ya había un grupo de adventistas en la ciudad de Lima, dirigido por el hermano Escobar, cuenta la historia que había intolerancia religiosa en ese tiempo, en la revista RH publican la historia de un joven de 16 años, por el hecho de bautizarse en la Iglesia Adventista del Séptimo Día, fue considerado muerto por su familia, quiere decir, que ya no tenía acceso de ingresar a la casa de sus padres. Cuando llegó el Pr .G.H. Baber llegó a Lima del país de Chile; cuando realizaban reuniones de adoración a Dios, recibían insultos.

“Para el 1901 la obra adventista en el Perú seguía atendida por la Misión de la Costa Occidental con sede en Chile. El pastor Enrique Balada llegó al Perú al inicio del mes de setiembre 1901, y estuvo cerca de un año, atendiendo la naciente iglesia.  A los cinco meses de haber iniciado su obra bautizó a un hombre, que había sido misionero evangélico por 22 años.” (RH 16 mayo 1907)



PIONEROS DE LA OBRA EDUCATIVA ADVENTISTA EN LOS AYMARAS Y QUECHUAS DEL PERÚ FUERON EDUARDO FRANCISCO FORGA Y MANUEL ZÚÑIGA CAMACHO

EDUARDO FRANCISCO FORGA

Nació en Arequipa, el día 26 de marzo de 1871, hijo de padre español, madre alemana, después de haber acabado sus estudios superiores en Europa, obteniendo su grado de Ingeniero de Minas empezó a preocuparse por los descendientes incas, especialmente por los aymaras y quechuas del sur del Perú.

Forga al regresar a su patria, a los 25 años, tenía propósitos claros en su vida, la de influir en su país con el sano vivir, aplicando principios de temperancia y hacer una reforma religiosa, apuntando la libertad de conciencia, porque era estudioso de la Biblia y vegetariano.

Como Ingeniero de Minas, trabajó en la mina de Huicuitambo, en los Andes del sur peruano, durante cuatro años. Pronto empezó una campaña sobre vegetarianismo, las leyes de la higiene y los principios del sano vivir. El escribía sobre estos temas, la imprimía y los distribuía estas publicaciones no solo en el Perú, sino en Argentina, Chile y Uruguay. El impacto en Perú fue tremendo, por esta razón en 1903 el gobierno peruano organizó un congreso antialcohólico en Lima, donde participaron delegados de todo el país. La reforma pro salud proclamada con tanta energía, mediante charlas, artículos y folletos, sin ser adventista todavía impactó en el Perú.


Por el descuido a los indígenas peruanos, por parte del estado peruano, en ignorancia y el servilismo, alcoholizado en las tradiciones romanistas, toma decisión de liberarlos mediante la educación cristiana.

El documento de petición hechas a Inglaterra, con las firmas de arequipeños y cusqueños, lo expresa el deseo de liberar, de la siguiente manera:

1.      “Es un hecho que, los indígenas peruanos viven bajo las más lamentables condiciones desde el punto de vista moral, intelectual y social.
2.      Que, es un deber sagrado, de patriotismo y humanidad, rescatarlos de su estado abyecto y triste.
3.      Que, el romanismo, luego de cuatro siglos de operación, ha demostrado su impotencia para elevar a los indígenas peruanos.
4.      Que los medios empleados por el gobierno con el objeto de civilizar a los indígenas peruanos, han resultado estériles hasta ahora.

Por las razones expuestas, solicito asistencia financiera y apoyo moral para llevar el evangelio a los indios quechuas; y a emplear maestros de escuela que puedan formar la iniciativa en la nueva era de la civilización entre los descendientes de un imperio histórico.” (Elvio Pereyra, Casa Editora Sudamerica, pág. 45, 46)

El año 1898 Eduardo Francisco Forga, el mismo año que llegaron los misioneros adventistas al Perú de Chile, se puso en contacto con los adventistas argentinos, y se suscribe a la Revista “El Faro”. Al ver que era una buena las publicaciones reimprimió muchos artículos de la revista; se convirtió en un vigoroso promotor de la reforma pro salud y de la literatura adventista, estas publicaciones se distribuyeron en el Perú, de esta manera preparó el terreno para la obra adventista en el territorio inca del Tawantinsuyo.  Estas publicaciones llegaron a las manos del curaca, jefe de la comunidad Aymara, Manuel Alcca Camacho, denominado Manuel Z. Camacho a la Región de Puno. Estos hechos no fueron aceptados por el clero de ese entonces, ni a las autoridades y fueron perseguidos.

Alcanzamos algunas informaciones más de este pionero que amaba al Maestro Jesucristo y a los habitantes quechuas y aimaras del Perú.

Eduardo Forga, era cuñado de William White, uno de los hijos de Elena de White. La esposa de William era Ethel May Lacey y su hermana Marguerite Lacey era esposa de Eduardo Forga.

Fue traductor y coordinador de traductores, de los libros escritos de Elena de White, como Conflicto de los Siglos, Ministerio de Curación, El Discurso Maestro de Jesucristo etc. y otras publicaciones de la iglesia. En una carta del Presidente de la Asociación General, Pr. A. G. Daniells dirigida al Secretario del Departamento de Publicaciones, C. H. Jones, le dice, refiriéndose a Eduardo Forga: “Se trata de un erudito, que creía que Dios lo había enviado para ayudar en la preparación de publicaciones para el mundo hispano; que hablaba alemán, francés e inglés, además de su lengua nativa, por lo que podría muy bien traducir obras de esas lenguas al castellano; que era enérgico y activo y que podría realizar, en poco tiempo, diez veces más que cualquier norteamericano en beneficio de las publicaciones en su propia lengua.” (Carta de 06 de enero de 1907) Se dedicó a la traducción desde 1908 hasta 1915, año de su fallecimiento.

Elena de White escribió a su hijo Edson y hace referencia sobre Eduardo Forga y le decía: “Que Eduardo ya estaba en California, en la casa de William, y que ella esperaba que el pudiera ayudar en la traducción a la lengua castellana de sus libros escritos en inglés, que era un hombre educado y temeroso de Dios que él se haya conectado con la obra aquí.” (Carta, 17 de marzo de 1912)

Escribió sobre el problema indígena peruano, Fernando Stahl, denominado el “apóstol de los incas”, leyó los artículos publicados por Eduardo Forga, antes de ofrecerse como misionero para el altiplano boliviano y peruano. (Review and Herald 1907 y últimamente obra de Elbio Peryra, Eduardo Francisco Forga, pág. 53)

El visionario Eduardo Forga, soñaba que los libros adventistas, por lo menos algunos fueran traducidos a la lengua quechua para alcanzar a los descendientes incas. “William C. White y Forga hablaron de la posibilidad. Como resultado de las conversaciones, William le escribió a Joseph Westphal en 1908, ‘Hoy le propuse al hermano Forga que, si consigue un buen traductor, mamá pagará el trabajo de traducción de CRISTO NUESTRO SALVADOR a la lengua quechua.’ " (Carta WCW, 29 de junio de 1908) Este proyecto no se ejecutó porque en esos años los indígenas quechuas no sabían leer. También soñaba en comprar un extenso campo para crear una institución de enseñanza para los naturales de su país.

Hizo donativos para la educación de los indígenas aymaras y quechuas del sur del Perú, para los naturales de Chucuito, Puno y para Pampachulla, Cusco. Según los testimonios de su cuñado William sobre el testamento de Eduardo Forga manifiesta: “La mitad de los bienes de ambos lo legaban a la Iglesia Adventista en el Perú, distribuida de la siguiente manera: Un tercio para la obra en Arequipa, un segundo tercio para la obra indígena peruana y el tercer tercio para la Misión Peruana, sin destino específico. La otra mitad sería para Margarite (esposa de Eduardo).” (EFF, carta a WCW, 14 de agosto 1913) Por esta razón Robert G. Wearner decía de Forga: “El más notable de los adventistas del Séptimo Día del Perú.” (Revista Adventista, julio de 1978)



MANUEL ALCCA ZÚÑIGA
(Manuel Zúñiga Camacho)

El precursor de la educación indígena en América Latina, Manuel Alcca Zúñiga, nació 25 de diciembre de 1871, en la comunidad indígena de Cutimbo, Distrito de Chucuito, en la Región de Puno, Perú; sus padres fueron Benedicto Alcca y su madre Eduarda Zúñiga Camacho, la madre natural de la Provincia de Anta, Cusco, según la información que nos alcanza el Dr. Jorge Cornejo Bouroncle, autor de las publicaciones Las Comunidades Indígenas, Tupac Amaru y otros; son informaciones recogidas por el profesor Justo Román Taiña Condori. (1)

El hijo del Precursor de la educación indígena, Jorge Camacho, según el profesor Justo Román Taiña, quien recorría recabando información para la elaboración de su Tesis de Grado, para obtener el título de profesor, en la Universidad Nacional San Antonio Abad Cusco, nos da a conocer, que, su madre niña de seis años, fue abandonada en Puno, por los soldados realistas que se dirigían hacia Bolivia, en una huida de familias de Cusco a la Paz; la niña fue recogida por una madre indígena llamada Jacinta, ella la crió, ya en la edad casadera tuvo unión matrimonial con Benedicto Alcca.

 Manuel Alcca Zúñiga, realizó sus estudios en la Escuela Municipal de Moquegua, el nivel primario y primeros grados del nivel secundario, recuerda mucho a su profesor de Historia. En Moquegua estaba en la casa de su compadre Dr. Higinio Herrera y su esposa Juana Pomareda.


A los 16 años se conoce con el italiano Iscardi, viajó con él a la ciudad de Lima y posteriormente a California, Estados Unidos, aproximadamente estuvo un año, regresa a Lima y se separa de Iscardi en 1894. De la ciudad de Lima regresa a Moquegua, inmediatamente ingresa como voluntario al ejército de Piérola. En 1896 se dirige a Iquique, Chile, se conoció con Manuel Vivanco y Melchor Estrada, trabajaron en la explotación de salitre, en este centro de trabajo se conocieron con sus paisanos Julián Vilca y Manuel Chura, después de diez meses, viaja a Santiago de Chile y trabaja en la Municipalidad.

“Ya joven vuelve a su tierra natal, en busca de su madre a Platería, Puno. En una de las fiestas de Candelaria de ese lugar, asistió bien vestido, tal como se vestía en la costa; al informarse la presencia de Manuel Alcca, los mestizos Luciano Salinas acompañado con otros jóvenes, fueron en busca de Manuel y le encontraron en un fiesta, y dijeron, no es bueno que un indio esté vestido con vestido de los mestizos, vamos a atraparlo y ensuciarlo, y así fue; lo atraparon a Manuel, le quitaron su saco y la camisa, la rompieron y le revolcaron y le pisotearon al lado de una pileta pública de Ácora. En otra ocasión el día de su matrimonio lo maltrataron, cuando salían del templo, lo embarraron su vestido de matrimonio y le insultaron con adjetivos de toda clase.” (2)


Al ver el maltrato de los mestizos a los indígenas, la explotación del hombre por el hombre, la exclusión de la educación formal por el estado y la pobreza humillante; él soñó en la educación de su raza cobriza y luchar, por la libertad de la ignorancia de los indígenas y decía así mismo: La única salvación para los descendientes de los incas, es la educación.

La explotación del campesinado era mediante el servicio de Jilaqatas, eran servicios gratuitos, que hacían los indígenas a las autoridades en sus casas y en las obras públicas. Este servicio gratuito en la región del Cusco, se llamaba ponguillos. El otro abuso que recibían los indígenas, era el engaño en las transferencias de sus terrenos a los hacendados, por ser iletrados los mestizos hacían firmar documentos de transferencia ilegales e irreales, documentos declaraban mayor extensión de lo que habían convenido; de esta manera eran despojados de sus tierras y a veces a la fuerza, con procesos judiciales. (3)


 En 1901 se puso una meta de era crear centros de alfabetización y escuelas rurales para indígenas, para que aprendan a leer, escribir y tener valores morales, con lo cual evitar los engaños de la clase explotadora, los gamonales patriarcales y el clero dominante. Muchos reconocen como el precursor del Indigenismo y Espartaco de su raza. En una ocasión dijo: “El único camino de salvación de la postración en que se encuentran, es aprender a leer... tomar la educación como práctica de Libertad.”



En 1902 crea la primera escuela rural indígena de Utawila, Distrito de Chucuito Platería, de la Provincia de Puno, Perú. Esta escuela rural indígena del Altiplano, fue la primera del Perú y de Latinoamérica, Manuel Z. Camacho tenía 24 años de edad.


Tuvo contacto con los adventistas de Arequipa, Chile y Bolivia, recibió apoyo de ellos, aún mucho más con la llegada del misionero Stahl al territorio de Puno.

 Su servicio militar en el ejército peruano en Arequipa, sus viajes a Chile, México, California y la influencia de la filosofía de la educación protestante en el exterior e interior de Perú le fortalecieron su pasión de liberar a sus compatriotas mediante la educación.  

Cuando la escuela dio frutos en la enseñanza de lectura, escritura, en la adquisición de hábitos de higiene y capacitación en la agricultura; los hacendados reaccionaron y clausuraron la escuela de Utawilaya, pero gracias al apoyo de la Misión Adventista y la Asociación Pro Derecho Indígena Tawantinsuyo, se reabrió la escuela, posteriormente se traslada a Platería y se convierte en una escuela grande.

En esos tiempos los maestros de la escuela y el promotor Mamuel Alcca Zúñiga fueron perseguidos; en 1903 fue tomado prisionero y recluido en la carceleta de la Prefectura de Puno, por dos años, en esta ocasión fueron defendidos por Teodomiro Gutiérrez Cuevas y por Manuel Gonzales Prada. Desde la cárcel de Puno escribía cartas a sus amigos de Chile y Argentina, en la que decía estoy por traer reforma a Altiplano y por promover la educación de los indígenas en mi país.

Manue Alcca, aceptando las doctrinas de Cristo enseñadas por los adventistas se bautizó en Chile. Witalaya fue la cuna de los adventistas de Puno, propalaba que, solo Verdad con mayúscula los hará libres de la vida de esclavitud. Como la filosofía de la educación del Maestro de Galilea Jesucristo promovía el desarrollo integral de los seres humanos, el desarrollo armonioso de su mente, cuerpo y espíritu.

En la primera escuela se exigía que los estudiantes llegaran a la escuela bien limpios para tener buena salud, se les exigía también la lectura permanente en la casa y en la escuela, solo así podían desarrollar su intelecto y también se les enseñaba práctica de valores morales: puntualidad, respeto, obediencia y otros valores. Los días sábados asistían a la Escuela Sabática, que eran clases de Religión, aprendían a memorizar porciones de la Biblia y a contar historias y parábolas.

En nuestra investigación encontramos un manuscrito en el territorio de habla quechua, que nos muestra la filosofía de la educación integral, esta filosofía había llegado a los habitantes de la región Cusco, el manuscrito dice: “Las cualidades que deben adornar a los que se dedican al profesorado son: salud completa, inteligencia, conocimiento y hábitos morales, de consiguiente pueden reducirse a tres: físicas, intelectuales y morales…Cualidades físicas en tener buena salud. Las cualidades intelectuales, es tener inteligencia activa, claridad en pensamiento e instrucción necesaria para dirigir la escuela y a los estudiantes. Las cualidades morales comprenden principalmente la vocación de modestia, paciencia, amor a la enseñanza, bondad y firmeza de carácter para amoldar a los niños.” (Manuscrito encontrado en domicilio de Marcelino Halire Cuchillo, Pomacanchi, Acomayo, Cusco, quien había promovido la creación de escuelas rurales para indígenas, como el aimara Manuel Alcca Zúñiga, conocido como Manuel Z. Camacho.

1.      BIBLIOGRAFÍA
·         Fernando Stahl, En el País de los Incas
·         Merling Alomía, Primeras Aventuras en el Perú
·         Elvio Ferreira, Eduardo Francisco Forga
·         Justo R. Taiña, La Educación del Hombre Andino
·         Rubén Chambi, Monografía
·         Pedro Kalbermatter, 20 años como misionero
·         Justo Taiña, La Educación Indígena, Tesis UNSAAC

·         Ximena Málaga, Educación Racializada, Tesis, Universidad Católica del Perú.
                                                

Lic. Alejandrino Halire


Adventistas en Puno y Cusco